Lista de contenidos
- ¿Por qué seleccionar una planta madre?
- Parámetros para seleccionar una planta madre
- Germinación y enraizado
- Vigor vegetativo
- Estructura
- Tiempo de floración
- Resistencia
- Producción de flor
- Hermafroditismo
- Producción de resina
- Sabor y aroma
- Efecto
- Contenido en cannabinoides
Aunque muchos cultivadores de cannabis utilizan semillas en todos y cada uno de sus cultivos, ya hablemos de cultivo bajo luz artificial o en exterior, algunos prefieren mantener plantas madre en espacios de cultivo interior de las que pueden ir sacando clones de manera constante, clones que después pondrán a florecer cuando les interese.
Por supuesto, ambos métodos de trabajo presentan ventajas e inconvenientes; por un lado, al cultivar semillas se dispone de mayor variedad en cuanto a sabores, aromas y efectos que cultivando clones. Además, normalmente las plantas de semilla son más vigorosas y productivas que éstos.
Sin embargo, al cultivar clones tenemos plantas idénticas entre sí, con exactamente el mismo sabor, aroma y efecto. En algunos casos, si se busca homogeneidad o ese sabor o efecto concreto, será la manera más fácil de conseguirlo. Por este motivo hay tantos cultivadores que parten de semilla, pero con la intención de seleccionar el mejor ejemplar para mantenerlo como planta madre en sus futuros cultivos. En este artículo os contamos cómo hacerlo.
¿Por qué seleccionar una planta madre?
Como ya sabemos, al cultivar semillas de una misma variedad se obtienen plantas que, si bien comparten la genética, pueden exhibir rasgos distintos entre ellas, dependiendo ya de lo estable que sea el cruce. A veces apenas hay diferencias entre las plantas, con lo que hablaríamos de un cruce especialmente estable. Sin embargo, en otras ocasiones sí observamos diferencias considerables entre individuos de la misma generación.
Sea cual sea el caso, si se tiene la idea de seleccionar una planta madre, se deberán tener en cuenta una serie de parámetros para asegurar que será una buena candidata. Como veremos más adelante, algunos de estos parámetros podrían considerarse casi de obligado cumplimiento, mientras que otros son totalmente subjetivos y podemos darles más o menos importancia dependiendo de cada caso.
Lo primero que uno debe preguntarse es: ¿por qué seleccionar determinada planta? ¿Cuáles son las necesidades que debe cubrir? Muchas veces, parámetros como la máxima producción en exterior pueden ser el primero a tener en cuenta, como sería el caso de grandes cultivos comerciales. Por otro lado, podemos encontrar muchos cultivadores a los que ese parámetro no les importe demasiado, dando mucha más importancia a aspectos como el sabor o el efecto. Sería el caso de la mayor parte de autocultivadores.
Vemos pues que gran parte del trabajo de selección es muy subjetivo y depende enteramente de los gustos del cultivador, mientras que otras veces depende de factores comerciales o profesionales…un cultivador comercial, un breeder o un autocultivador pueden estar buscando cosas muy distintas en una planta!
Parámetros para seleccionar una planta madre
Vamos a ver algunos de los aspectos más comúnmente tenidos en cuenta a la hora de seleccionar una buena planta madre para futuros cultivos de clones. Por supuesto, no tendría demasiado sentido ponerse a seleccionar plantas entre un cultivo de esquejes, pues son iguales entre sí. Se empieza pues con semillas feminizadas o regulares, cualquiera de los dos tipos sirve siempre y cuando no sean semillas automáticas, pues no hay manera de mantener una planta autofloreciente en estado vegetativo continuado.
Antes de continuar, merece la pena destacar que una selección no es un cultivo normal, especialmente si queremos ser rigurosos. Aspectos como el etiquetado de las plantas y de sus clones, que deberemos mantener hasta cosechar las plantas y decidir con cual nos quedamos, son más importantes que nunca. Asimismo, es buena costumbre no fiarse de la memoria de uno y llevar un diario o registro de cultivo donde anotaremos cualquier observación que pueda tener relevancia más tarde, a la hora de decidirse por una planta u otra.
Veamos, ahora sí, algunos de los parámetros que deben tenerse en cuenta a la hora de hacer una buena selección:
Germinación y enraizado
Si bien el vigor en la germinación no es un aspecto clave ni decisivo para determinar si una planta será «mejor» que otra, sí es conveniente tenerlo presente, procurando siempre elegir entre las plantas que antes hayan germinado y más vigor hayan mostrado durante esta primera fase. Por supuesto, puede suceder que el mejor individuo haya tardado dos o tres días más en germinar que sus hermanas, por ello insistimos en que no se trata de un factor clave. No vamos a descartar un potencial clon élite porque haya tardado unos días más en germinar que otras plantas!
Asimismo, habrá cultivadores para los que la producción de raíces sea realmente importante; siempre lo es, pues un sistema radicular sano, fuerte y bien establecido suele ser sinónimo de plantas sanas y crecimiento vigoroso, pero es aún más importante si, por ejemplo, uno dirige un cultivo comercial de venta de plántulas o clones enraizados! En este caso, la velocidad de enraizado del esqueje o plántula y de producción de raíces una vez trasplantados sí será de vital importancia.
Vigor vegetativo
El vigor que muestra la planta durante la fase de crecimiento sí puede ser un factor bastante importante, especialmente en casos de cultivos comerciales. Pocos cultivadores profesionales querrán trabajar con plantas que en interior demanden de un periodo de crecimiento demasiado prolongado, o que en exterior produzcan poco en comparación a otras debido a su pequeño tamaño final, prefiriendo siempre plantas que muestren buen vigor vegetativo para ganar tiempo, ahorrar costes y – sobre todo en exterior – conseguir plantas realmente productivas.
El mismo caso puede darse con las llamadas nurseries, granjas que principalmente se dedican a la propagación y venta de clones. De poco les servirá una planta que necesite semanas de crecimiento entre una tanda de clones y la siguiente, ellos necesitan plantas que reaccionen bien a las podas y vuelvan a desarrollar nuevas ramas y brotes cuanto antes. Por contra, para el cultivador que simplemente busca calidad en sus flores éste puede ser un factor de importancia secundaria, estando dispuesto a sacrificar tiempo de cultivo o producción en favor de un producto de grado superior.
Estructura
De nuevo, se trata de un factor con una importancia relativa, que depende en gran medida del tipo de cultivador. Normalmente, se prefieren plantas que ramifiquen de forma generosa y soporten bien el peso de las flores, pues como todos sabemos cada rama significa producción, ya se tenga en mente producir flores, clones o extracciones de resina. Para un productor de clones se trata de un factor esencial, lo mismo que para la mayoría de cultivadores de exterior, donde es difícil conseguir producciones realmente importantes con plantas que no ramifiquen y muestren buen vigor.
Sin embargo, el cultivador que use la técnica SOG quizá prefiera plantas que apenas ramifiquen, con un patrón de crecimiento columnar y una sola rama principal donde concentrar la producción de flores. Quizá un breeder está buscando una planta que no desarrolle grandes hojas con largos peciolos y transmita ese rasgo, o puede que lo que se busque sean plantas con tallos muy flexibles que soporten bien los vientos fuertes en exterior… cada cultivador tiene necesidades muy específicas que pueden ser diametralmente opuestas a las de otro cultivador, y eso es algo que se refleja en el tipo de plantas que selecciona uno y otro.
Tiempo de floración
Aquí sí encontramos un factor que puede ser determinante, sobre todo en el sentido de que todo cultivador quiere plantas lo más rápidas posible. Ya se trate de cultivadores comerciales o de autocultivadores, de interior o de exterior… siempre se quiere que la floración termine cuanto antes! Decimos que puede ser determinante porque quizá no nos importe que una planta tarde una semana más que su hermana si lo que prima en nuestra selección es el sabor, el efecto o la estructura, pero lo que es seguro es que nadie se quedará con una planta que muestre las mismas características que otra pero tarde que más en estar lista para la cosecha.
Resistencia
Otro factor fundamental a la hora de elegir una planta, sobre todo teniendo en cuenta que no es buena idea elegir como planta madre a un ejemplar que sea especialmente propenso a problemas como plagas y enfermedades, dificultad en la absorción de nutrientes o que no se adapte bien a estar largos periodos de tiempo en la misma maceta, un problema este último que todo aficionado al breeding habrá experimentado al intentar conservar plantas macho.
Se procurará pues elegir siempre entre los ejemplares que mayor resistencia a este tipo de problemas hayan mostrado, intentando conservar una planta fuerte y resistente que seguro nos ahorrará muchos contratiempos en el futuro. Quizá haya cultivadores que, por motivos de clima, necesiten plantas resistentes a la humedad, o particularmente resistentes al estrés lumínico, pero sin duda en lo que todo el mundo coincide es en querer plantas resistentes a plagas y hongos.
Producción de flor
Sin lugar a dudas, la producción final o rendimiento de la planta es uno de esos parámetros en los que muchos se fijan. De un modo parecido a los tiempos de floración, está claro que todo el mundo prefiere plantas productivas…muy productivas! Al fin y al cabo, una inmensa mayoría de cultivadores siembran cannabis para recoger sus flores, por lo que un buen rendimiento siempre será bienvenido.
Una vez más, será cuestión de que el cultivador encuentre un equilibrio entre la producción deseada y el resto de parámetros importantes para él. Por supuesto, encontrar la planta que rinda como una campeona y sea de primera calidad es uno de los principales objetivos para muchas selecciones. Si a esto le sumamos un tiempo de floración aceptable, podemos estar ante un clon que dé que hablar en un futuro!
A parte del peso final de las flores en sí, en relación a este parámetro también puede considerarse el ratio o relación cáliz/hoja. Personalmente, y por poner un ejemplo, he descartado plantas por tener demasiadas hojas en la flor, demasiado trabajo de manicura para tan poco cogollo; en mi caso prefiero quedarme una hermana con mejor ratio cáliz/hoja y que no produzca tanto peso final en flor.
Finalmente, y en el caso de estar seleccionando machos para algún proyecto de crianza, es interesante fijarse no sólo en la producción de racimos florales, sino también en la de polen una vez éstos están maduros. De poco nos servirá un macho con mucha flor pero que apenas produzca polen…quizá éste no sea un gran problema para los productores de semillas regulares, pero para los de semillas feminizadas sí lo es!
Hermafroditismo
Por supuesto, es una cuestión importante y más aún si se están seleccionando plantas para breeding. Aunque puede haber excepciones, pues algunos de los clones élite populares hoy en día tienen conocidas tendencias al hermafroditismo, como normal general se deben descartar los individuos monoicos en una selección. A nadie le gusta fumar cannabis con semillas!
Puede darse el caso de plantas que, avanzada la floración, desarrollen unas pocas «bananas»; si la calidad de las flores merece la pena, no supondrá ningún problema grave, pues además en estos casos muchas veces las flores macho ni siquiera son fértiles. Sin embargo, si se trata de «auténticas hermafroditas», mejor descartarlas incluso en el momento de identificarlas.
Producción de resina
La producción de resina siempre había sido un factor en el que fijarse, pero con el auge en el consumo de extractos de resina de primera calidad que hemos visto en los últimos años, para muchos hoy en día se trata de un factor determinante a la hora de quedarse una planta o descartarla. Los rendimientos en resina pueden variar drásticamente de una planta a otra, oscilando – a grandes rasgos – entre el 10 y el 25%. Siendo así, no resulta raro que para los productores y amantes de los concentrados sea un parámetro de crucial importancia!
Si lo que se pretende es seleccionar un macho, a parte de la estructura y el olor que desprenda incluso en crecimiento, la producción de resina es un factor muy importante para decidirse por uno u otro. No suele ser habitual ver machos con profusión de tricomas glandulares, así que en caso de encontrar uno conviene guardarlo con mucho cariño, y procurar usarlo mucho!
Sabor y aroma
De nuevo, uno de los parámetros más importantes a la hora de seleccionar un planta. Ya estemos buscando plantas pequeñas y robustas o grandes monstruos con infinidad de ramas, siempre querremos aromas y sabores intensos y que nos atraigan. Podemos obviar algunos de los parámetros que hemos visto a la hora de seleccionar nuestra futura madre, no importándonos demasiado su estructura o tiempo de floración, pero seguro que ninguno querrá mantener una planta que apenas tenga olor o sabor, o que éstos sean desagradables o resulten poco atractivos.
En muchos casos, es el primer factor que se tiene en cuenta al seleccionar: se escogen las plantas con mejor aroma y sabor, y luego se estudia el resto de parámetros para decidir cual de ellas será la futura madre.
Efecto
El efecto es otro de esos factores que puede hacer decantar la balanza de uno u otro lado. Aunque en ocasiones pueda darse más importancia a otros, como el tiempo de floración o la producción de cogollos en caso de cultivos comerciales o cuando simplemente se busca el mejor rendimiento posible en términos de números, en muchas ocasiones es un factor importante para la persona que realiza la selección, que descartará las plantas que no tengan el efecto deseado.
Esto cobra especial importancia para los usuarios de cannabis medicinal, para los que éste sería prácticamente el único factor a tener en cuenta; si la planta ofrece el efecto deseado, dará igual cómo crezca o huela! A la hora de seleccionar, se escogerán sólo las plantas que ofrezcan el efecto que se busca, y luego – como siempre que se tiene un primer factor clave e indispensable bien marcado – se estudiarán otros parámetros de cara a la selección final.
Contenido en cannabinoides
Al igual que ha sucedido con la producción de resina, que ha sido un factor que ha ganado mucha importancia en los últimos años, el contenido en cannabinoides es, para muchos negocios y pacientes de cannabis medicinal, el principal parámetro a tener en cuenta. Sobre todo para los productores de extractos y cannabinoides aislados, es muy importante encontrar plantas con el índice de cannabinoides que se busca.
Incluso en el ámbito doméstico, cuando más y más gente está decidiendo cultivar su propio cannabis en casa para paliar sus dolencias, podemos analizar nuestras flores con prácticos kits que incluyen todo lo necesario para hacerlo, como el kit de análisis de cannabinoides Alpha-Cat. De esta forma, sabremos el contenido aproximado de los principales cannabinoides, algo que puede sernos muy útil para seleccionar una planta en concreto.
Como podéis ver, no son pocos los parámetros a tener en cuenta para realizar una buena selección, aunque afortunadamente en la mayoría de los casos podemos reducir los verdaderamente importantes para nosotros a unos pocos. Y, ¿quién sabe? Quizá el próximo clon élite salga de nuestro cultivo!
Como siempre, no dudéis en compartir vuestros consejos, dudas o experiencias al respecto, será un placer leeros y contestaros.
Felices cultivos!